De cosas y nada:
Hay cosas que se piensan por algo y cosas que se piensan por nada. Pero pensar en la cosa más bien que en la nada es un problema: la nada no se piensa y la cosa solo la podemos pensar, pero que no se piensa la nada no significa que la nada no piense, es que en la misma manera que pensamos la cosa, la nada piensa la cosa que no pensamos, por lo cual en cada cosa que pensamos hay una nada de cosa que pensamos. De ahí que sea la nada lo que pensamos mientras que pensamos en ninguna nada y a la vez, la nada nos piensa como cosa que pensamos, es decir, nada.
Entonces: ¿Quién escondió la paradoja?
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